el mundo

todo el mundo se lavantaba lentamente ante tal noticia, lentamente todo a un silencio busca. como si las palabras ya no importaran en las miles dichas.
Vas a ir me preguntaban cuando una gran nostalgia se empozaban en el fondo de mi ser, en medio de tantas alegrías, como si no importara nada.
Ya no importa nada, el tiempo corre y vuela, el viento volvera, mas el timepo no.
Lhora lamentas no haber hecho varias cosas, pero es tarde, el hombre ira al infierno por lo que no hizo, pero no por lo que hizo; mientras que ira al cielo por lo que hizo y no por lo que no hizo.. (retumbaba en mi cabeza).
No se  aun que hacer, como si la tierra me llamara en su infinito correr, pero aun no lo se, no lo se.
El tiempo aun corre presuroso, no voy con él, para mi el tiempo se fue, pero lo conseguiré...
...tal vez

La fiesta

Como si en miles de voces se podía descubrir lo que ocultaba celosamente.
La algarabía inundaba mi ser (tal ve sor el hecho de la fecha), pero aun no se por que. La gente no tenia cuidado de nada, el mundo a sus pies retumbaba, el mundo a sus pies caía lentamente en miles de atrocidades, como si ante todo eso su mundo fuese inmutable. El sol se puso rápidamente, se oyo un pequeño grito a lo lejano con el ultimo rayo de sol, este aunuciaba el eterno silencio una vez mas, el mundo se contuvo, una lágrima corrió a lo lejos en la oscuridad de la tarde, en lo callado de su fiesta todos quedaron impábidos por causa de la ausencia del sol. Se detuvo todo lentamente, el aire los mesia como si estuviesen ausentes en mente pero su cuerpo se paro, todos contemplaban como pequeñas estrellas lejanas aunuciaban la siguiente fase de la gran fiesta, donde la gotas de lluvias describían otra tonada en miles de voces la lentitud se convirtió en movimiento suaves, acompasados con la cancion tarareadas por todos, bajo al neblina que cubría sus pies, sus tobillos y con la garua que los hacia uno. Y nada mas.

Hasta mañana

El aire, el mar y el cielo describe mi ser traqs cada giro de la tierra en los rincones mas escondidos de esta se peude visualizar lo interno. En cada reflejo del sol frente a quel apasible mar me podras ver, en las miles de pequeñas gotas me veras caer, tambien en lo temperamental del viento me veras fugar; inclusive creeras verme mosto, mas no lo será, pues aun soy yo.
Tu me conoces y nadie mas, la naturaleza y tu, parece que fue diseñada por ti, y asi me parece cada dia, y espero que nos veamos el dia  de mañana aun en la garua de las calles tocandome tras cada pequeñas gota.
Hasta mañana

Las estrellas

La televisión aun prendida anunciaba la madrugada con el noticiero matutino. Él aun medio soñoliento por la dura mañana, su rostro aun en las hojas hmedas de su pequeño cuaderno.
Segun él era algo duro, por lo que significa pasar la noche describiendo cada estrella con un verso; para poder escribir y sentirse util, decia él. Pero era talentoso en lo profunso y artesonado de su verso.
La noche se retiraba con los rayos del sol, el sol alba rayaba, los pajaros cantaba, la tetera anunciaba que podia prepararse otra vez esa taza de cafe cargado de Chanchamayo, que ansiaba su ser tras cada segundo que pasaba, lsu cansancio parecia reflejarse tras cada paso que daba, en su desordenada habitacion, los paleles por el suelo, las tazas por el cuarto anunciaba su descuido; los versos describian personas en las estrellas, a lo lejano, en lo fugaz.
Su vida aun se resumia a su incesante labor de describir la vida en versos de gran sentido.
El sol la luna y las estrellas lo llamaban en la oscuridad, el na prominente frialdad de la noche, en lo amplio se la calle; pero el preferia su lapiz, y papel, en la lejana habitacion, en su soledad.
No salio, mas si escribio, el y su soledad. mas anada mas.

Nada especial

El viento aun lo trataba de tumbar con su impetuosa fuerza, mas él inmutable en la pasibilidad de su soledad siguio caminando en ella. La tranquilidad de la noche en la impetuosidad del viento parecia gradarle en gran manera. El caminó por aquel camino, recordando aquellas sendad que en tiempos pasados, en la lejania que describia al pasado en viejos reflejos ya olvidados.
La noche fue enclareciendose conforme se alejaba lentamente de la cuidad. Al pasar por las plazas solo, en la obscuridad del amanecer, fue adentrandose en una selva medio luminosa buscando encontrar algo, el ambiente era mas humedo. La vida parecia darle un nuevo mundo para poder disfrutar, en lo olvidado que parecia. La ciudad con sus luces que parecian llamarlo tras cada paso que se alejaba, tras cada minuto que el respiraba en aquel nuevo lugar, en nuevas dimensiones, en nuevos aires; y en nuevas aventura.

Mientras la oscuridad lo escondia en lo profundo el se adentraba oculto en su busqueda de la nada.

Tal vez la encontro...

 

De cada dìa

Son las 7:12 según mi reloj,el cual me regalo mi tía Olenka, aun estoy pensando en que hacer, ya que es una respuesta que dependerán de varias cosas, conforme transcurra el día.
El sol ya se puso, ya dio su gran espectáculo, para buenos y malos, ya se oculto en la lejanía de mi tierra, y escondió para mañana nacer otra vez; sé que volverá, pero no se como lo hará, bajo el mismo manto de una fina garua como hoy?, o como el gran rey que se impuso en la gran libertad de las nubes que se pasean en su imperio grande y campante como siempre.

La luna nos refleja a lo lejos su blanca belleza, describe nuestras siluetas a lo lejos con gran definición como si nos conociera demasiado. Aun no se si salir a conocerla o dejarla con la frialdad de la noche. Tal vez nunca me vuelva a ver y tenga el gusto de dibujar mi silueta en las frías calles de lima gris, y nublada en meses de densa neblina; la noche cayó y caerá cada día tras la partida del gran sol.

 
Tal vez saldré a caminar bajo las sombras que me brindan las bellas nubes en las frías y poco despajadas noches del invierno limeño; saldré a caminar a buscar aquellas gotas perdidas en el aire, y poder disfrutar de su soledad en la noche. sintiando en mi rostro la esencia de su origen en lo alto, o en el azul mar del litoral, no lo se.
 

Nosotros los de entonces ya no somos los mismos decía un libro, las bastedad de la vida queda chica en tantas cosas por decir, sentir expresar o transmitir, describir, contar tal vez charlar, pero transmitir lo de cada dia, en pequeñas porciones lanzadas al aire en comentarios sin sentido tal vez.

 

1º post

Los polares aun volaban en las aulas estresadas despues de un analitico examen de calulo, los profes como reflejos de presonas en busca del desarrollo autodidacta del alumno, con sus clases llenas de comentarios (a veces fuera de lugar, otras fuera de todo), como si en miles de palabras buscaran el amplio sentir del limite, bajo vanas palabrerias.
Otro con palabras que nos elevaban a nuevos aires, de grandesza y complicaciones sin sentido, otros aun con sentido politico no hacian mas que comentar sus logros e impedimentos ante un mundo lleno de miles de obsataculos con miras a ellos.
Lo bueno es que aun existen aquellos que en palabras llenas de fervor aumenta el animo y te promueven a niveles de excelencia, son poco, pero ahi estan aun.
Los miles de alumnos aun soportando los desatinos en otras miles de aulas al rededor del Perù y el mundo, bajo

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Xtopher -- http://xto-pher.blogspot.com

No se...

Pues aun podía verte a lo lejos en medio de tu vida, en un sistema cerrado, aun no existía, en miles de plazas eras tú, y contemple tu figura descrita baja la densa neblina, en la lluvia vi descrita la bella silueta acercándose; mas no eras tú.
En la playa vi tu tenues pisadas siguiendo delante mió mi rastro, en la arena como si realmente me buscases, como si en el inclemente calor del desierto pudieras sentir mi tosco aroma, con tu fina nariz de marfil tallado, por los mas diestros artesanos en una noche de luna, bajo la melodiosa música de un cantor lejano que contaba nuestro adiós, y próximo ver, en medio de interminables aventuras, en medio de un continuo y permanente adiós.
- Aún no se a quien-

A Victoria

A Victoria:

Como si pudiera contemplarte sin pensar, como si en lo profundo del alma acabase todo, sin palabra alguna y sin decir algo. Mas inmutable podría quedar en la mirada de tu silencio desesperante; y verte ahí, y simplemente morir, ver como sutilmente se acerca la muerte a tu lecho, y yo contemplado tu linda mirada.
Cruce desiertos, camine mares de gentes en miles de calles te busque, mas no encontré tu vida en mis manos, sino solo tu esperanza. Cruce fronteras y morí en el intento de verte vivir, y lo hice, y lo haré.
Aun estoy acá, y estaré, pues aun tu mirada por causa mía está, mas no la veré mas, sino que la contemplaré desde el arco de la otra esquina, a lo lejos en miles de miradas, enmares de males, ahí estaré velando por ti, mi querida victoria. Aun te espero, ahí estaré en un eterno infinito estaré, bajo la sombra de tu querer reposaré, y me verás.
Disculpa hoy mi desconcentración, mas sabes que apareceré sin avisar ni más.

-Woody Allen aun me sorprende…-

Dante 2

Dante 1

Extracto de parte 2

...Subí a frente con la cabeza baja, en la misma actitud de la semana pasada. me senté, y mientras aclaraba mi garganta alzè la mirada, y con toda confianza, dije:
- Me es un honor estar frente a ustedes, en una de las tantas noches, en uno de los tantos lugares donde uno puede refugiarse de la obscura soledad de las calles limeñas.Lima, la amada, la gris, la solitaria, en sus noches donde la neblina desciende con tal majestuosidad, donde ni el frió impera; sino que sujeto a la neblina prepara el camino por donde ella andará anunciando su reinado temporal.Los viejos edificios dan espacio y permiso para que pasen las edificaciones "modernas" en su autoritarismo de lo "nuevo y mejor". Las grandes historias y eternos recuerdos quedan bajos los efìmeros escombros de una de las tantas casas del centro, donde ya casi nadie pasa, donde ya casi nadie mira por el poco interés comercial posible. Donde ayer había quintas embrujadas,hoy se elevan majestuosamente enormes edificios con novísimos inesperados, pero en cuadriculas de lo artístico, con grandes razgos de lo poco esperado, anunciando la llegada de lo nuevo con aires a Comercial (una vez más).
-Me puse de pie-
La gente ya no espera tener una casa para vivir, sino vivir para tener una casa a donde llegar de trabajar para descansar y volverse a levantar. Desvisten los cerros cada mañana en carros de eterno mover, en grandes y veloces autopistas de infinitas longitudes, con gran rapidez.La despedida de la neblina anuncia que el sol aparecerá y la desplazará, en sus primeros rayos, con suma delicadeza, la luna parece desaparecer a lo lejos, y el sol la despide por el otro lado con unos pequeños rayos que danzan mientras raya el alba, y despierta a la ciudad, y junto con él a la gran animosidad del movimiento limeño.Y otra vez en ese ciclo interminable, de cada día, en bailes eterno y rutinarios para personas, campantes que reposan en sus grandes casas, con nuevos hijos (a veces de exportación), bajo el trabajo interminables de nuestra inmutables ... y siempre rutinaria ciudad. Para sus grandes placeres existe nuestro trabajo,y su tiempo; nuestro sudor y su dinero; aunque eso dependerá de nosotros cada día, en cada hora, bajo cada rayo de sol, o envoltura de la niebla....gracias...

Extraido de la parte 3

...La soledad estaba sentada ,sola como siempre, mirando a lo lejos como una multitud lucia a todos la compañía, la soledad nunca se movió, algunas veces parecía acercarce a ella alguien cabizbajo, pero cada vez que se acercaba se alejaba mas. El viento bailaba entre las hoja, acompañado, entre sus pies, como si describiera una figura bajo su mirada cabizbaja, como si buscase una solución en las miles figuras descritas por aquellas hojas bailarinas. 3 hojas, se turnaban para bailar con el viento, tal vez pogueaban (por que chocaban súbitamente entre ellas), o tal vez bailaban despreocupadamente un suave vals, el frió no influía, los rayos de sol simplemente dibujaba tenuemente si asincopado movimiento, nada contemplaba su baile, pero ellas disfrutaban cada figura descrita bajo cada ventarrón; la soledad parecía bailar junto con ellas con su mirada; pero cuando menos se dio cuenta el aire egoistamente jaló a las hojas al otro extremo del mundo las hojas, mas la soledad se movió, el sol no proyectaba su sombra, así que nunca estuvo acompañada, aunque ella haya creído que las hojas la acompañaban, nunca fue así.Tal vez este solo, pero hoy veo como sus fugaces miradas y su efìmeros pensamientos son para mi y mis palabras hachadas al aire, describen figuras en todo este lugar, ustedes mirando su tranquilo baile, ustedes que buscan el sentido que tratan de dibujar, sin saber cuando se irán...

Por el 15

El polvo no dejaba ver, tampoco respirar, la bulla anunciaba que el orden se había roto desde hacía demasiado tiempo; la gente desesperada, los niños llorando a lo lejos, todo un pueblo alarmado, miles de hombre trabajando a la luz de la luna, con reflejos de las lejanas fogatas.

La tarde se vistió de luto, no se si por el humo, o el mismo pueblo contristado; una lejana columna de humo anunciaba al mundo que algo había detenido el reloj, algo había hecho que medio mundo tome en cuenta la seguridad y mas…

Tal ves si la tierra alguna vez se detendría de temblar. Sentados aun juntos, aun esperando, aun empolvados, la ayuda, otros a lo lejos aun sin sentir, sin hablar, sin pensar, contemplando cuerpos, contemplando saqueos, pero aun viven, aun sobreviven, a un fuerte remezón, una inolvidable, noche de terror.

Su soledad...

Ante la obscuridad de la noche, simplemente se dirigía a acostarse como cada, noche, pero como siempre a escribir unos versos (como si ante ellos se desfogase). El viento aun trataba de tumbar aquella pequeña casa de aquella olvidada cuidad.
Ante sus versos no existían nada mas que el y su eterna soledad. El mar existía a la puerta de su cuarto, el sol quedaba junto a su vieja estufa, los frondosos arboles de grandes bosques quedaban justo detrás del enorme castillo que el en algún tiempo no muy lejano había construido. Su soledad y el ponían las cosas de color. el mar dejaba de ser ligeramente azul, y se convertía en un rojo ante el ocaso de eterna duración en su ventada de constante resplandor de atardecer.
El nunca estuvo solo comentaba cuando a veces veía las personas que alguna vez conoció. el les contaba de sus innumerables viajes a través del carmesí mar , a través del turquesa del cielo, en aquellas águilas incansables que lo llevaban a conocer los lugares mas recónditos del universo, en aquellos botes de papel que nunca pidió, pero siempre estuvieron, nunca estuvo solo, pues el gran roble , en el cual descasaba en las tardes lo arrullaba con el fondo melódico de las golondrinas el pasar, el nunca estuvo solo, ni lo estará, pues el siempre vivió en su mundo y lo hará, hasta que tenga sueño y pueda descansar en paz.

A Carpe

O mi querido Carpe, como has cambiado, me has dejado una mala impresión con todo el arte dentro tuyo.
Con palabras ten bellas y cortantes, como las que cada vez nos regalabas en cada edición, hoy tan turbulenta, tan lejana que apenas se te ve pasar cada 2 meses, cada vez que a alguien se le ocurre sacarte a pasar, a lucirte por unos días sin decir nos cuando regresaras; cuando nos llenaras con el perfume de tus dulces y raras palabras, con prosas a veces profanas, pero nos sorprendes cada vez. Que paso contigo, a un año de tu nacimiento ya vas a un ocaso casi seguro?
Que te pasa a ti en quien deje mis primeros escritos, algunos de mis primeros cuento fueron en honor a ti (aunque algunos no). Que te pasa?, pesaras salir un vez mas, aunque sea a despedirte, simplemente te marcharas? Aun que sabes que te esperaré, se que algún día volverás, y ahí te
volveremos a recordar hasta que se te ocurra salir.

Escrito en fechas cuando toda la gente que pertenecia a Carpe Diem (en laFIIS-UNI) habalba de hacer algo, y poco a poco morian en su triste trajinar

Muy lejano

Un risco describía a la lejanía el viejo lugar donde aun silbaban las aves aquel encuentro clandestino de viejos amigos, contando de lugares inolvidables, de épocas soñadas, que lo lejos describían la felicidad sufrida (pero alcanzada).

El castillo podía describir lo que había vivido, por las cicatrices que marcan su sempiterna existencia, en aquel lugar alto de algún lugar del hemisferio norte, donde la nieve siente placer al cubrir 2 veces al año ese bello lugar, mutando su esplendor de grandes batallas a un refugio esperado por lo lejanos visitantes, que acogidos por sus grandes murallas quedaban asombrados por su inmenso tamaño y gran historia.

Los murales describían de manera muy detallada la vida en las cruzadas, en las épocas de escasez, en la épocas donde la vida fue dura, pero también incluía como el luchar de cientos de pueblos llego a formar su carácter e identidad, de tal manera que hoy dejaba al mundo mas que un castillo, sino, que para todos dejaba su historia, sus épicas batallas, sus innumerables amoríos en las blancas colinas en busca de un refugio (encontrando amores), su avance cognoscitivo, y su avance cultural.

Grandes hombre aun quedan de manera monumental en aquellas lejanías, como grandes trovadores de la historia perdida. Describen el reflejo del castillo en los caminos (a veces por monedas, pero a veces por el honor, y otras por el gusto), pero en la felicidad de sus historias ellos mueren.

Pero se que el lector sabrá conde encontrar, así que:

Disfrute su viaje por las lejanías en bellos arroyos, en inmensos parajes, y de su suave y simple brisa que describe el descanso que se vive ahí.

El café

La luz de aquel pequeño poste en aquel lejano país le dejo ver a lo lejos apoyada en él a un mujer (pues no sabría precisar su edad) bella como no había visto desde la vez que se despidió de su mujer en aquel funeral hace ya 49 meses, a lo lejos el la miraba de una manera casi normal si no fuera por que el café aun estaba en su boca.
Lo cálido del café en lo frió del invierno de aquel lugar lo llevo a simplemente sentirse sumamente acogido en aquella mesa, solo aun la miraba a lo lejos. El simplemente buscaba con que distraerse, mas parecía que algo lo incomodaba, aquella mujer a lo lejos, de la cual suavemente la luz describía su silueta, la describía con las pequeñas gotas que iba callendo de la garua que aquejaba aquel día. La noche de tornó mas fría, el aun con la taza de café sentado, la miraba y buscaba describir su mirar al aire, pues ya hacia mas de media hora apoyada en aquel lugar. La descripción se volvió mas apasionante cada vez que ella trabaja de acomodarse por mantener el poco calor; él con cuarta taza de café estaba observándola, su mirada no se movió de ahí por mas de una hora en busca de una mirada de ella.
El café de aquel lugar había observado esa escena hace 1 mes, al 4º aniversario del fallecimiento de su esposa, el había recurrido por 1 taza, pero la permanente silueta a lo lejos lo mantuvo viniendo al café durante el mes mas frió del año. El nunca le habló. ella nunca se movió del poste, el café nunca se le acabó, su ser nunca cedió al frió intenso, al frió que siempre existió en su ser, y solo pudo ser opacado por aquella lejana imagen de belleza, de misterio y de duda.

Por la noche

La maldad había subido a tal punto que el frió empezó a embriagar su sangre, además del frió, la furia descendía lenta, pero de una manera sobre natural por sus venas, embargando todo su ser; lo convertía en un hombre distinto, una persona que cada vez sabia mas, pero que también quería mas. La obscuridad del atardecer, lo calmaba (pues disfrutaba el frió, sentir el aire gélido rozar con su piel tensada, por el aire que buscaba renovarlo), los pequeños rayos del agonizante sol lo acariciaban a o lejos, la luna un lejana lo buscaba con ansias, el mar embravecido lo aclamaba, quería que sea tragado por lo profundo de su inmensidad, el viento trataba de tumbarlo, pues en el veía un un rival, los perros escondidos a lo lejos lo miraban con sumo temor. El aun buscaba descanso en lo profundo de una mirada que nunca encontró, la mirada de su madre, la cual nunca encontró. La mujer lo abandonó, con su única vecina, la señora nunca mas apareció, a los días la vecina trató de abandonar al infante, sin fruto; pues casi se lo comen los perros en la oscuridad de la noche. El creció con mucho interés por ella, no por que alguna vez lo abandonó, sino por que simplemente quería morir con su tierna mirada. La noche oscureció como nunca lo había hecho, la luna brillo, como nunca lo hará, el mar descanso extrañamente, parecía tender una trampa, el viento parecía enamorar o, trataba de mantenerlo a su merced. La luz de la lejana luna describió, tenuemente la sombra de una mujer mayor a lo lejos que se acercaba, con pasos lentos, pero buscando descubrirse rápidamente. La luz blanca de luna anunció con pavor la escena, la mujer con una mirada había derribado a aquel joven que cayó a sus pies sin mas que un dulce gemir de un sollozo muy parecido al de un niño; callendo a sus pies mojándolos, se despidió, el limpiando se las lágrimas buscó su mirada; la luz de la luna cayó directamente a sus ojos, el se repuso limpiando se la cara, la miró directamente, le dio un beso, en la frente. Se retiró, caminado al mar que se exaltó, el viento trató una vez mas de tumbar a la arena, entró lentamente a las aguas movidas del mar frió en una noche que buscaba ocultar el emotivo momento.Nunca mas se le vio por esos lugares, nunca se encontró su cuerpo, nunca mes se supo algo de su madre, tampoco, se volvió a ver un día tan extraño como el que fue ese día.

...

Las gotas de la garua del amanecer aun estaban en el aire, todo el ambiente se sentía aun sumamente fresco, libre de cosas perturbable. El viento parecía juguetear como un niño con sus cabellos, todo los arboles parecía que disfrutaban el mecerse en el suave vaivén del viento aun inquieto y enérgico por el amanecer de hoy. Ella aun tranquila buscaba un dulce refugio en la suave brisa que la visitaba esta mañana, el frió parecía importarle muy poco, pues disfrutaba el simple hecho de estar ahí, sentada junto a las gotas interminables de lluvia. Los rumores que de los cuales había sido advertida parecía importarle muy poco (mas bien, daba la impresión que no quería recordarlos). Los rumores de guerra habían sido una noticia de todos los días durante 3 años, rumored que habían costado caro a aquel pequeño lugar, la gente se retiraba a la ciudad en busca de viajes a otros lugares (la mayoría al otro lado del mundo, del cual se hablaban maravillas), costaron vidas, pues aun me acuerdo que la señora Robles, no duró ni 15 minutos con la ideas, pues cayó a los segundos, y murió. Esta ves fue distinto, pues a lo lejos el día anterior se vio un pequeño resplandor que iluminó la obscura noche a las 11:37 pm, ella pensó que era la fiesta de la cosecha, pero, al oír un pequeño estallido, se acurrucó un poco mas en su cubrecama de alpaca, la cual le regaló su abuela días antes de su viaje a Japón (del cual nunca regresó). La garua empezó a caer una vez mas, con mas fervor, y pasión, como si le advirtiera que regrese a su casa, la lluvia aun la llevaba a traer a memoria esas ideas de fechas ya casi olvidadas, de rumores lejanos, y casi ciertos en un eterno juego de azar. Una vez mas se iluminó aquella mañana húmeda, esta vez se pudo divisar a lo lejos el humo sumamente denso que empezó a subir oscureciendo la mañana y llevándola una vez mas a una madrugada frió, procaz y esquiva, que infundía temor a cualquier mortal. Ella parecía asustada, pero no, ella simplemente se hecho, en aquella vieja banca (sin temor del mojarse) y empezó a buas sentir el frió, el frió penetrante del cual alguna vez se enamoró, y del cual nadie la separará, se oía a lo lejos la gente gritar, los niños llorar, los jóvenes correr a las armas, mas ella simplemente se echó a descansar, sin perder tiempo a disfrutar lo que casi nunca disfrutó, el descanso en la paz eterna, no se movió más, ni titubeó al mirar la gente correr, a la gente alarmada gritar. Parecía algo irracional, algo raro, y sumamente loco; era como si estuviera segura de algo lejano, de algo que llegará de algo que perdurará. y así fue su actitud hasta el final.