Como si la noche puediera encubrir las mas remotas ocurriencias en la neblina que parecia descender en aquellas calles de la majestuosa Lima. Como si fuese nuestro complice la noche parecia insitar a las personas a esconderse en ellas con la mas sutil vestimenta que esta trankilidad.
La noche del dia de hoy parecia peculiar.
Su vestimenta era oscuramente atractiva, con un alto sentido del estilo. se podeia decir que era altamente bella. Un lila oscuro, con pantalon negro que buscaba esconderse en la trankilidad de la noche, sus cabellos discretamente ocultaban una parte de su rostros, la otra parte dejaba entrever una mirada seria, pero altamente cautivante. La vincha que hacie esto posible parecia perder entre lo oscuro de su cabello. Era simplemente admirable su forma tal sutil de hacer las cosas, perecia ser adornadas por un toque de encanto, su mirada eternamente seria, con ligeros esbozos de una sonrisa, eran altamente esperados y cautivadores.
La noche parecia seducirlos hacia su interior lleno de sorpresas; el cielo parecia pintarse con amplios brochazos de un azul altamente oscuro, con pequeños puntos tintinantes en su inmensa amplitud de luces eternamente lejanas, con grandes bloques oscuros de nubes altamente contrastables en la intensidad de lo frio de la noche, anunciando el exodo de ellas. El parqeu solo como una gota de agu en un inmeso mar de oleos, como si este hubiera sido separado por el frio y como anfitrion a la suave brisa que paseaba todas las noches por ahi. Todo estaba puesto, todo estaba dicho en la quietud de la noche oscura, seductora, y fria de algun parque limeño.
Sus pasos eran tan cortos como fuese posible, el parque era suyo, las 7 bancas tambien. Se sentaron en una de ellas, contemplando las inmensidad del cielo, con dedos ligeramente enlazados, hablando de amores muertos, y pasados, de amigos, y amigas, de padres,y hermanos, reflejando su intimo ser como si el frio de noche podria curar esos olvidos del ser, y ligeresas del mundo. La nostalgica conversacion los hizo entrar en terrenos de una entrañable ternura, como si pudieran complementarse. Tal vez fue el frio, la noche, la soledad, pero en momentos de profundo silencio no existio absolutamente nada que los haya separado, parecian a lo lejos, fundirse en uno solo, como si el frio haya sublimado sus cuerpos, sus manos y su ser, como si la oscura noche los liberaze en expresiones corporeas. Mas hoy se puede decir que no paso, nada la noche desaparecio, y con ella todo que en un mundo de posibilidades pudo existir, hoy solo quedan solo dos amigos. No queda nada, nu las marcas de las pisadas, hoy parece que nunca existieron las bancas, parece que la tierra arrazo con rastro alguno, y el cielo con imagen alguna que en augun momento puedo existir, hoy no queda nada...nada.
--
Xtopher
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario